Eventos corporativos a bordo: 5 ideas para un Team Building memorable

Celebrar eventos corporativos a bordo es una forma innovadora y atractiva de reforzar el espíritu de equipo, ofreciendo a los empleados una experiencia verdaderamente inolvidable.
Salir de los entornos de trabajo convencionales y subir a un barco o una embarcación convierte cualquier actividad de creación de equipos en una aventura, al tiempo que proporciona un entorno inspirador para desarrollar habilidades esenciales como la comunicación, la cooperación y el liderazgo.
Lejos de las distracciones de la vida cotidiana, los equipos tienen la oportunidad de conectar de una forma única, afrontando juntos retos creativos y estimulantes.
En este artículo, exploramos cinco ideas originales para eventos corporativos a bordo que harán que su team building sea memorable y esté lleno de buena energía.

1. Paseo al atardecer con meditación

Un viaje a bordo al atardecer es una oportunidad perfecta para crear un momento de pausa y conexión entre los miembros del equipo. Mientras el barco se desliza por las tranquilas aguas y la luz dorada del atardecer tiñe el cielo, los participantes pueden aprovechar este escenario único para una sesión de meditación guiada.

Guiados por un instructor experimentado, los empleados pueden practicar técnicas de respiración, atención plena y relajación, liberarse del estrés acumulado y encontrar un espacio de paz y claridad mental.

Además de promover el bienestar individual, esta actividad ayuda al equipo a conectar de una forma más genuina y colaborativa, reforzando los lazos de confianza y armonía entre todos. La serenidad del entorno náutico y la belleza de la puesta de sol hacen de ésta una experiencia memorable, perfecta para revitalizar la mente y preparar al equipo para nuevos retos.

2.Cine a bordo

Convertir la cubierta del barco en un cine al aire libre es una idea que promete sorprender y deleitar a toda la tripulación. Con una pantalla instalada bajo el cielo estrellado y el suave sonido de las olas de fondo, esta experiencia de cine a bordo se convierte en algo verdaderamente único. La tripulación puede elegir una película inspiradora o entretenida, que fomente tanto la relajación como el fortalecimiento del espíritu de grupo.
Antes de la proyección, se pueden distribuir mantas, cojines y palomitas para crear un ambiente acogedor y relajado. Es una forma excelente de redondear un día de actividades, permitiendo a los empleados relajarse y compartir un momento agradable y distendido.
Además de proporcionar una pausa de bienvenida, esta experiencia refuerza el sentimiento de cercanía y camaradería entre los miembros del equipo en un entorno informal e inolvidable.

3. Cata de vinos de Oporto

Una cata de vinos de Oporto mientras navega por aguas tranquilas es una experiencia de team building sofisticada y culturalmente rica.
Esta actividad combina un relajante paseo en barco con la oportunidad de descubrir la tradición y los sabores únicos de los vinos de Oporto, una de las producciones vinícolas más conocidas de Portugal.
Guiados por nuestro equipo, los invitados podrán explorar las distintas notas y características de los diferentes tipos de vino de Oporto. Durante la cata, se explica la historia y el proceso de producción de este vino emblemático, promoviendo no sólo el conocimiento cultural, sino también momentos de intercambio e interacción entre los participantes.
Esta experiencia estimula la comunicación y el intercambio de impresiones en un ambiente relajado y elegante, fortaleciendo las relaciones de equipo de una forma única.

4 Pinturas sobre lienzo

Crear una sesión de pintura sobre lienzo a bordo es una forma creativa y divertida de fomentar la expresión individual y el trabajo en equipo. Con el horizonte y las aguas como inspiración, cada empleado recibe un lienzo, pinturas y pinceles para dejar volar su imaginación e interpretar el paisaje que le rodea.
Esta actividad permite a los participantes explorar su lado artístico, independientemente de su experiencia pictórica, en un ambiente relajado y sin presiones. Un artista o instructor puede guiar la sesión, compartiendo sencillos consejos y técnicas para aquellos que deseen un poco de ayuda para dar sus primeros trazos.
Al final de la actividad, los empleados pueden compartir sus obras y comentar sus interpretaciones, creando un momento de conexión y compartiendo perspectivas.
Además de llevarse a casa un recuerdo personalizado del evento, esta actividad fomenta la confianza, la creatividad y la unión del equipo en un entorno inspirador y relajante.

5 Conversaciones de autoconocimiento

Una charla de autoconocimiento a bordo proporciona un entorno informal y estimulante para que los miembros del equipo compartan conocimientos y experiencias. Este formato de «miniconferencia» permite a cada empleado exponer un tema de interés personal o profesional, creando un espacio para el aprendizaje mutuo y el desarrollo colectivo.
El entorno náutico ofrece una atmósfera relajada, lejos de las formalidades de las salas de reuniones, lo que facilita una interacción más estrecha y genuina entre los participantes. Con cada presentación, surgen debates e intercambios de ideas que fomentan el pensamiento creativo, la empatía y la valoración de las habilidades únicas de cada miembro del equipo.
Esta actividad es especialmente valiosa para fomentar la comunicación y el respeto por las distintas áreas de especialización, promoviendo el crecimiento del equipo en un entorno atractivo.
La «charla de conocimientos» a bordo transforma el evento en una experiencia enriquecedora, en la que cada participante contribuye a reforzar el grupo con su visión y sus experiencias.

6.Paseo en barco por el valle del Duero

Un viaje en barco por el impresionante valle del Duero es una experiencia única que combina el team building con el descubrimiento de una de las regiones más encantadoras de Portugal.

Esta actividad lleva al equipo a explorar las riberas y los viñedos del Duero, navegando por paisajes impresionantes llenos de historia y tradición.

A lo largo del día, los empleados podrán relajarse y disfrutar de las laderas cubiertas de viñedos y de los pintorescos pueblecitos que hacen del valle del Duero Patrimonio Mundial de la UNESCO. Se trata de una oportunidad para desconectar de la rutina diaria y conectar con los compañeros de forma auténtica y relajada, en un entorno que inspira unidad y admiración por la naturaleza.

Durante el recorrido, se pueden incluir paradas para visitar bodegas locales, donde el equipo puede degustar Oporto y otros vinos de la región, y aprender sobre la producción vinícola que caracteriza al valle.

Esta experiencia no sólo proporciona momentos de ocio y relajación, sino que también fortalece las relaciones interpersonales en un entorno único y memorable, creando vínculos que se reflejan en el trabajo diario.